Llega el fin de semana y es momento de relajarse con un trago, pero... ¿cuál es el que te hará menos daño? El vino puede ser la mejor respuesta

Es habitual pensar en las ventajas y desventajas de ciertas bebidas alcohólicas, sobre todo cuando haces por cuidarte y no quieres que una noche tire a la basura todo tu esfuerzo: que la cerveza es básicamente pan líquido, o las bebidas combinadas tienen altos niveles de azúcar son algunos razonamientos comunes; sin embargo, una realidad es que el vino tinto es una bebida ideal si lo que buscas es pasar un rato agradable con una copa sin ingerir calorías en exceso.

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De acuerdo con un reciente estudio publicado en el King’s College de Londres, las personas que beben vino tinto tienen una diversidad más grande de flora intestinal en comparación de los que no lo consumen, además de tener niveles más bajos de obesidad y colesterol “malo”.

Los beneficios del vino para las personas

No solamente es en el sistema digestivo donde se encuentran en estos beneficios. El vino tinto también puede mejorar el balance total del cuerpo: para el sistema neurológico el vino es uno de los mejores para disminuir el riesgo de padecer demencia, especialmente por causas como el Alzheimer, de acuerdo con el Instituto Central de Salud Mental en Mannheim, Alemania. Los académicos encontraron que las personas que bebían una copa de vino diaria mostraron menos signos de esta enfermedad.

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El vino también es bueno para el corazón, ya que gracias a los polifenoles, sustancia que se encuentra en plantas y da color a ciertas flores y frutas y debido a sus propiedades antioxidantes, puede disminuir el riesgo de padecer una enfermedad cardíaca a las mujeres sin importar su origen étnico.

Esta bebida también ayuda en la fertilidad femenina, ya que el alcohol del vino blanco influye en la reserva de óvulos, especialmente, la calidad, salud y viabilidad de los mismos de una forma positiva gracias al resveratrol. Además de suprimir las moléculas que causan la inflamación y mejorar la producción de insulina.

El vino tinto y el estómago

Sobre el aumento de la flora intestinal en las personas, se cree que la razón principal se debe a que los polifenoles del vino tinto actúan como una defensa química natural que actúa como antioxidante y combustible para que los microbios del estómago se puedan reproducir de una forma más rápida y mejorar la flora intestinal.

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Al respecto el Dr. Tim Spector, líder de la investigación, explicó “este es uno de los estudios más grandes que ha explorado los efectos del vino tinto en los estómagos de casi tres mil personas de diferentes nacionalidades que ayudaron a proveer el conocimiento sobre los altos niveles de polifenoles en la piel de la uva que es la responsable de la salud cuando se usa con moderación”.

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Por esta razón, la próxima vez que tengas la posibilidad de beber alcohol, pide una copa de vino rojo para mejorar tu salud.