Holbox: las razones por las que amarás visitarla, ¡y volver!
Holbox: inmenso mar de tonos verde y azul que se mezclan con el cielo. Desde mi habitación, respiro el aroma a café que escapa de mi taza, mientras lenta y ocasionalmente empujo mi hamaca hacia atrás. Solo un poco. Siete de la mañana. Silencio.
A lo lejos veo a alguna ave exótica que llama a despertar. En el mar, justo frente a mi balcón, posa un flamingo rosa. Más adelante, noto la presencia de un pequeño bote pesquero sin ancla, que apenas se mueve. Y es que este mar de colores claros es tranquilo. Aquí viene el agua a descansar.
La playa de Holbox es ocupada por algunos pequeños hoteles de madera: hamacas, tumbonas y kayaks son los implementos indispensables para pasar las horas en este lugar.
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El paraíso existe y se llama Holbox
Ubicado a 3 horas de Cancún, Holbox es una hermosa isla ubicada frente a la costa norte de la Península de Yucatán en México. Es conocida por sus impresionantes playas, aguas cristalinas y ambiente relajado. Se trata de una isla pesquera en la que se han establecido algunos hoteles, restaurantes, bares y tiendas de artesanías… Todo en pequeño.
En Holbox no hay autos, pues las calles son de arena. Los medios de transporte son las bicicletas y carritos de golf, que disfrazados con atuendo de taxis, te ofrecen llevarte de un lado a otro de la isla.
Mapaches, iguanas y flamingos rosas son los vecinos mientras duermas en este apacible lugar. En Holbox encuentras hoteles muy económicos, que en todo caso, se trata de casas adaptadas. Hasta un par de hoteles boutique con excelente servicio, que complementan tu visita a esta playa que más que un destino turístico naciente, es una visita al cielo. También te puede interesar: 7 destinos originales en México si crees que ya conoces lo mejor del país
Las Nubes de Holbox
La cálida y pacífica isla de Holbox es el hogar de Las Nubes de Holbox, morada llena de encanto. Se trata de un refugio que deleita a sus huéspedes con las formidables vistas de su mar, que ubicado a los pies del hotel, que agasaja con sus tonos, su sol escondiéndose y la paz que en muy pocos lugares del mundo se puede apreciar.
Su formidable terraza te invita a recorrerla paso a paso, sin prisa, en este destino que tiene un ritmo diferente. Deleitarse con sus alimentos, cocinados con absoluto cuidado, y con ese aroma a pan recién horneado. Su bar, ubicado en la parte superior del restaurante, bien podría pasar por la cabaña de lujo de Robinson Crusoe, una alta palapa que se convierte en el espacio ideal para el romance o para un muy agradable atardecer con los amigos.
Sus albercas, amigablemente acabadas con cemento liso, refrescan tus sentidos y te invitan a relajarte sin prisa alguna, mientras que sus bungalows y suites han sido armoniosamente decorados y amueblados para que descanses sin reparo, mientras el tiempo no pasa por este lugar.
Deja en casa el estrés y atrévete a disfrutar de la paz, del silencio y de un paisaje que solo Van Gogh habría podido ilustrar: Las Nubes de Holbox. |
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