10 hábitos que consideras normales pero que realmente son una adicción
Cuando una conducta se ha vuelto un hábito que se repite sin control y que domina la voluntad, se trata de una adicción, pues convierte a la persona en dependiente de una sustancia, actividad o relación, producto de las diversas sensaciones de bienestar, placer o recompensa que le producen.
Sin embargo, no siempre se es consciente de las adicciones considerándolas como decisiones que se toman para poder pasar el día, no solo son drogas legales o ilegales, e incluso unas son sorpresivas. ¿Crees que estás libre de adicciones? Espera a conocer este listado:
10. Café
Beber café durante el desayuno o en una tarde fría, es normal. Pero se ha vuelto una adicción cuando es indispensable tomarlo para poder despertar, o cuando se siente imposibilidad de activarse, si no se bebe. Esto se debe a que la cafeína, es considerada como una droga adictiva.
9. Dulces y chocolates
Dado que estos productos generan sensaciones de bienestar, y proporcionan energía rápida –aunque no duradera-, los caramelos y chocolates son consumidos por todos. Lo peligroso de esta adicción es que puede terminar provocando serios problemas de salud, como triglicéridos elevados, sobrepeso, obesidad y diabetes, entre otros.
8. Ejercicio
La adicción al ejercicio, también llamada vigorexia, se presenta en quienes han pasado de ver al ejercicio como algo importante en la vida, por cuestión de salud, y lo ven después como lo más importante de su vida. Consiste en pasar horas y horas haciendo actividad física, incluso fuera del gimnasio, donde sea y en cualquier momento.
7. Bronceado
Al parecer, las radiaciones ultravioletas del espectro de la luz solar, son las responsables de la adicción a broncearse, ya que en el cuerpo humano liberan endorfinas, sustancias que producen la sensación de felicidad. Adicción que comparten quienes buscan el bronceado de forma compulsiva, por creer que con ello mejoran su apariencia.
6. Cirugías plásticas
Es sabido que las operaciones estéticas causan adicción. Y es que al lograr mejorar una parte del rostro o del cuerpo, es tal la sensación de alegría y bienestar que se provoca, que hace que se quiera más y más. Lo que puede estar asociado a personalidades obsesivas, que tienen fijaciones negativas con su cuerpo y una baja autoestima.
5. Teléfonos inteligentes
Una de las adicciones más generalizadas del mundo actual es la adición a los smartphones. Consiste en no poder dejar de ver el celular, aun cuando ya no se necesita, checándolo todo el tiempo. Lo que puede acabar en accidentes, discusiones familiares, distracciones y problemas laborales, dormir mal, tener problemas de atención y concentración, y daños en la vista, entre muchos otros.
4. Redes sociales
Según estudios recientes, la adicción a las redes sociales se debe a que la sensación de azar que produce la recepción de los mensajes, es similar a la que produce la cocaína: exaltación del estado de ánimo y vigor. A lo que su suma la estimulación que genera la curiosidad por no lo novedoso, o por saber sobre los detalles de la vida de otros, lo que estimula las ganas de saber más y más.
3. Sexo
Cuando el sexo domina el pensamiento y la conducta, hay una adicción a la actividad sexual. Se debe a un impulso incontrolable, que a su vez, puede deberse a una forma de escape de la tensión, ansiedad o malestar físico; o resultado de haber padecido una infancia con problemas familiares y poco afecto, por lo que se busca, en las relaciones sexuales, formas de compensar el amor del que se careció.
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2. Apuestas
Esta es una de las adicciones más dañinas, ya que llevan a la quiebra financiera, al abandono familiar, e incluso, al suicidio, al no poderse pagar las deudas que se adquieren en las apuestas. Consiste en no poder dejar de jugar en casinos, juegos de cartas, juegos de mesa.
1. Ir de compras
Comprar compulsivamente es una adicción cada vez más común, resultado de una gran ansiedad, de poco control de los impulsos, y de una necesidad de sentir bienestar, ya que genera la producción de dopamina, una sustancia encargada de sentir placer.
Ante la toma de consciencia de cualquier adicción, es importante atender las repercusiones negativas que están provocando en la vida, y tratar de cambiar estos malos hábitos. Si no es posible hacerlo individualmente, es necesario acudir con un profesional de la salud.