Tener miedo es completamente normal y puede ser benéfico para el organismo. Pero puedes evitar que sea patológico y se mezcle con la incertidumbre de estos momentos

Estamos viviendo un momento cultural donde el miedo tiene un lugar importante, además de ciertas expresiones fóbicas por cuestiones muy concretas y peligros reales de la pandemia.

Se expresa este temor que no podemos nombrar, que se une a aspectos muy personales. Por ejemplo, piensa en las situaciones dolorosas que has imaginado respecto a posibles pérdidas en esta cuarentena, la incertidumbre de lo que está sucediendo o va a pasar en tu vida y con tus seres queridos, la situación del país. La vivencia de la atemporalidad del encierro desequilibra tu tranquilidad y la idea de que pronto vendrá el retorno a las actividades aunque no sabemos cómo será, son algunos de los temores comunes que todos atravesamos esta cuarentena.

El miedo que te encierra

«El miedo es ese pequeño cuarto oscuro donde los objetivos negativos son revelados». Michael Pritchard.

miedo

Muchas de las veces no podemos identificar o tener conciencia de lo que nos preocupa y tal motivo nos lleva a pensar y a pensar en algo que se convierte en un encierro de ideas. Así nos aferramos a ideas negativas y nos anclamos aún más en lo conocido como un salvavidas que nos permite sentir un aparente control de las emociones y situaciones. Por ejemplo, hacer lo mismo cada día de la semana, en el orden acostumbrado y de forma rígida, dejando de lado toda espontaneidad.

Como dicen por ahí, nos sostenemos en un Más vale malo por conocido que bueno por conocer.  Dejamos también de sacar ventaja del aburrimiento natural de la cuarentena que genera facetas creativas. Y de paso, se agregan dificultades de adaptación debido a esta actitud rutinaria y predecible.

Rompe con la sensación de desvalimiento

«El miedo es natural en el prudente, y el saberlo vencer es ser valiente». Alonso de Ercilla y Zúñiga.

MIEDO

Realiza y avanza en lo posible, permítete tener un poco más de desorden y confía en tu capacidad para improvisar. Vive y haz un listado de las  herramientas con lo que podrás solucionar el día a día pese a tantos cambios.

Esta actitud te sacará del encierro, al distinguir que más allá de lo concreto de la pandemia, el miedo es lo que en realidad te paraliza. Lo que está detrás del miedo, el misterio que al identificarlo en lo posible, se reduce al expresarlo y comprenderlo y además, nos brinda confianza.

Una confianza que fortalece tus capacidades y posibilidades para enfrentar lo nuevo. Romperás así con la idea de lo que te atemoriza y por tanto, podrás superarlo con mayor facilidad. Un voto de confianza en ti mismo te permitirá salir de la sensación de desvalimiento, desolación y afrontar el miedo de forma más efectiva. 

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