Los dilatadores vaginales son dispositivos que ayudan a tratar diferentes condiciones que afectan la salud y bienestar de tu vagina.

Seguro has escuchado hablar de los dilatadores vaginales, dispositivos que se utilizan para estirar la vagina y tratar problemas relacionados con el suelo pélvico. Te explicamos cómo funcionan y cuáles son sus beneficios. ¡Ojo! No son un juguete sexual.

Qué condiciones ayuda a tratar un dilatador vaginal

El uso de los dilatadores vaginales se recomienda cuando hay ciertos cambios o tipos de incomodidad en la vagina o suelo pélvico.

El uso de los dilatadores vaginales se recomienda cuando hay ciertos cambios o tipos de incomodidad en la vagina o suelo pélvico. Aquí los más comunes.

  • Pérdida de elasticidad en los tejidos de la vagina
  • Dolor al momento de tener relaciones sexuales
  • Espasmos musculares en el suelo pélvico
  • Reducción en el tamaño de la vagina
  • Cambios en la vagina causados por la radioterapia

Existen diferentes tamaños que se van adaptando al problema, es importante que un experto te revise antes de empezar a usarlos. También te puede servir: 5 Consejos para cuidar tu vagina y mantenerla saludable

Beneficios

Además de estirar los músculos y tejidos de la vagina, los dilatadores tienen otros beneficios para mejorar la salud sexual y mental de las mujeres.

  • Disminuye las molestias provocadas por el vaginismo
  • Reduce la sensación de dolor durante la penetración vaginal
  • Previene las fibrosis después de someterse a radioterapia
  • Evita que la vagina se reduzca después de alguna intervención ginecológica como vaginoplastia
  • Reduce la tensión muscular causada por el estado emocional antes de tener sexo
  • Ayudan a identificar lo que estimula los espasmos

Cómo usar un dilatador vaginal

 

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Una vez que tu doctor realizó el diagnóstico y recomendó el uso de un dilatador vaginal, debes aprender a utilizarlo de manera correcta para evitar daños en la vagina.

  1. Normalmente el kit contiene dilatadores de diferentes tamaños y grosores, pueden ser de plástico o silicona
  2. Debes iniciar con el dilatador de menor tamaño para probar con cuál te sientes más cómoda
  3. Ya que lo tienes, acuéstate en la cama boca arriba, flexiona ligeramente las rodillas y apoya los pies en la cama
  4. Separa las piernas a la altura de los hombros
  5. Asegúrate de que puedas tocar la vagina, si se te facilita, puedes usar un espejo
  6. ¡Relájate! Inhala y exhala varias veces. En algunos casos, hacer ejercicios de Kegel puede ayudar a relajar los músculos para facilitar la entrada del dilatador vaginal
  7. Lubrica el dilatador para que sea más fácil su introducción
  8. Poco a poco introduce el dilatador, en el momento que empieces a sentir dolor, ¡detente!
  9. Realiza ejercicios de Kegel para relajar los músculos, y tratar de introducir más el dilatador. No te preocupes, si ya no toleras más, poco a poco lo lograrás
  10. Ya que está adentro, haz ligeros movimientos con el dilatador: empuja hacia adentro y hacia afuera para extender la longitud de la vagina. O rótalo en círculos para ensanchar.
  11. Después de cinco o diez  minutos, saca el dilatador.

Es común presentar un poco de sangrado vaginal, así que no te preocupes. Solo limpia con papel y utiliza un protector. Si tarda más de un día en quitarse, consulta a tu doctor.

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Cómo cuidarlo

Antes y después de usar los dilatadores vaginales, lávalos con agua caliente y jabón. No olvides secarlo con una toalla, y guardarlo en su empaque para evitar que se contamine.

Tu salud sexual es muy importante, cuídate, y no hagas cosas que la pongan el riesgo. Siempre sigue las recomendaciones del especialista.

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