12 Verdades sobre la obesidad que debes conocer antes de iniciar tu dieta

¿Estás cansado de que otros crean que la obesidad o sobrepeso que tienes es por decisión propia?¿Estás a dieta y recuperas los kilos perdidos cuando la dejas? ¿Comes lo mismo que los demás y sólo tú subes de peso?

Antes de renunciar a tratarte de nuevo, conoce los datos sobre la obesidad de voz de Doctor Valentín Sánchez, Vicepresidente del Colegio de Endocrinólogos de México, y otros datos obtenidos durante las conferencias organizadas por la Asociación Civil Obesidades, el Instituto Nacional de Salud Pública, la Federación Mundial de Obesidad y los laboratorios Ifa Celtics y Novo Nordisk.

1. La obesidad es una enfermedad crónica

La obesidad es una enfermedad que debe controlarse por las comorbilidades que pueden aparecer cuando no se trabaja en ello (diabetes, hipertensión arterial, dislipidemias) y comprometen su salud. Eso sin contar con los problemas musculoesqueléticos y emocionales que aparecen por el exceso de peso y el estigma social que padecen quien vive con ella.

2. No solo es exceso de peso

El exceso de grasa y peso que se deposita debajo de la piel, también se deposita en hígado, corazón y cerebro, liberando ciertas sustancias que incrementan el riesgo de presentar enfermedades cardiovasculares y ciertos tipos de cáncer (mama, endometrio, próstata y colón).

3. La obesidad se determina con varias medidas

Aunque el índice de masa corporal es el primer valor de referencia que se toma para diagnosticar la obesidad, esta medida debe completarse con el perímetro de cintura (indicador indirecto de que la grasa en los órganos) y los porcentajes de masas grasa y muscular del individuo, que se obtienen con una báscula de bioimpedancia.

4. Los genes pueden acentuar la obesidad

De acuerdo a las investigaciones que se han hecho existen cerca de 70 genes modificados que predisponen a una persona a ganar mayor porcentaje de grasa. Entre ellos están lo que descontrolan el apetito, los que contribuyen a la acumulación anormal de grasa y los que aumentan la posibilidad de padecer colesterol y triglicéridos altos. En la población mexicana, se ha calculado que este factor es del 55%.

5. Se trata diferente en cada individuo

Ahora además de revisar al paciente, el médico le hace una historia amplia de su obesidad, desde el momento en que inició, fluctuaciones de peso y factores que la han condicionado, entre otros, con la finalidad de saber cómo superar las barreras que pudiera haber en el tratamiento y sostener sus buenos resultados durante un largo plazo.

6. Suele requerir de apoyo psicológico

Ante la población con obesidad que padece depresión (15% de ella) y ansiedad (16%), los médicos suelen trabajar con sicólogos para que les ayudan a sus pacientes a combatir estos problemas emocionales. El control de estos últimos es importante para que esta gente se adhiera a los cambios de estilo de vida que requiere para estar saludable.

7. Las psicoterapias son útiles

La terapia cognitiva conductual que enseña a modificar pensamientos y comportamientos negativos y a tomar soluciones en situaciones exigentes. Lo que permite establecer metas reales en corto tiempo y controlar los trastornos de conducta alimentaria (atracón, bulimia y adicción a ciertos alimentos) que suelen presentar estas personas.  

8. No se trata con dietas estrictas

Estudios demuestran que las dietas estrictas reducen el peso solo por un corto tiempo. Ahora se prefiere hacer un plan de alimentación individualizado y tener como primer meta una reducción de peso del 5 al 10% (porcentaje con el cual la salud de este paciente comienza a mejorar) y un menor consumo de alimentos industrializados

9. La obesidad no requiere ejercicios intensos

Aun cuando la OMS recomienda a los adultos 300 minutos semanales de actividad moderada, ó 150 de actividad intensa para dejar el sedentarismo, la persona con obesidad no está obligado a cumplirlos, sobre todo si tiene una limitación funcional. Hay rutinas sencillas de 7, 8 minutos que al mejorar el desempeño físico son un buen inicio.

10. Existen medicamentos para combatirla

Los medicamentos para tratar la obesidad deben aparecen en la consulta de registro sanitarios de la Cofepris y ser prescritos por un médico especializado en obesidad, pues algunos de estos fármacos mal recetados pueden causar crisis hipertensivas y enfermedades tiroideas o detonar trastornos psiquiátricos o de conducta alimentaria cuando son mal recetados.

11. Habitualmente no se trata con cirugías bariátricas

Las cirugías bariátricas conllevan riesgos de infección, hemorragias y deficiencias nutricionales, por lo que generalmente no se utilizan para tratar la obesidad. Solo se recurre a ellas cuando el tratamiento farmacológico y la modificación en el estilo de vida no son suficientes para reducir las complicaciones crónicas que acompañan a la obesidad.

12. La obesidad requiere seguimiento continuo

Por ser una enfermedad crónica, la obesidad se trata toda la vida, aunque no siempre con la misma frecuencia, como ocurre al principio del tratamiento cuando las visitas con el médico son semanales o cuando la persona con obesidad cursa por algún problema de salud (física o emocional) que le dificulta seguir el tratamiento.

Especialistas para tratar la obesidad

Gracias a entrenamientos, cursos de alta especialidad y maestrías que en obesidad ofrecen hospitales de la Secretaría de Salud o prestigiadas universidades (UNAM, La Salle, la Universidad Iberoamericana), ya hay personal de salud que trata de manera integral y respetuosa esta enfermedad. Algunos de estos profesionales, han sido incluidos en el localizador de tratamiento de la Asociación Civil de Obesidades.

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