Petting, la técnica sexual más efectiva para revivir el erotismo en pareja
¿Qué es el petting?
El petting es la práctica sexual que consiste en tener sexo sin penetración. Aunque a algunas parejas pueda parecerles extraño, el sexo puede ser completamente satisfactorio y placentero si en lugar de concentrarse en el coito, se enfocan en las caricias, besos, roces y toda clase de contactos que no conllevan penetración.
El petting no se trata del descubrimiento de una técnica novedosa ni mucho menos, pero en un mundo donde las relaciones sexuales están regidas por el coitocentrismo, volver a los básicos y disfrutar con todos los sentidos de un encuentro sexual sin prisas conlleva una dosis erótica que probablemente olvidaste tras tus primeras experiencias sexuales.
¿Qué es el coitocentrismo y cómo afecta tu vida sexual?
El coitocentrismo es la idea de que la parte esencial de todo acto sexual es la penetración y que sin ella, ningún encuentro erótico está completo. Aunque esta noción ha dominado nuestro comportamiento sexual durante siglos hasta el grado de que ni siquiera dudamos de ella, lo cierto es que el coitocentrismo nos aleja de un sinfín de posibilidades de disfrutar de la sexualidad en pareja.
El coitocentrismo también es resultado de los distintos tabúes que se imponen sobre el sexo, un conjunto de normas morales dictadas desde la religión y otros principios que conciben erróneamente al acto sexual como algo antinatural, sucio, indeseable o banal, y no como un componente natural del ser humano que todos tenemos derecho a disfrutar y experimentar.
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Desde esta perspectiva, la idea de que el único sexo aceptable es aquél que sucede entre un hombre y una mujer casados por la iglesia, en la posición de misionero y en la oscuridad, con las sábanas cubriéndoles hasta los hombros reduce el espectro de nuestra sexualidad al mínimo, privándonos de un universo de placer, conocimiento mutuo y erotismo en pareja.
Consejos para practicar petting
Olvida la penetración
El primer paso (y el más importante) para practicar el petting es olvidarse de la penetración. Deja de lado esa ansiedad y concéntrate en disfrutar y hacer disfrutar a tu pareja. Rompe con la mentalidad de que las caricias, los besos y roces son parte de algo llamado “juego previo”, pues desde este momento estás explorando y compartiendo tu sexualidad con tu pareja.
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Atrévete a explorar
La masturbación mutua, el sexo oral y todas las posibilidades sensoriales y eróticas entre dos personas forman parte del mundo del petting. Acariciar los genitales de tu pareja, ver cómo lo hace ella misma, besar su cuello y otras áreas poco comunes es un buen principio, pero tu experiencia alcanzará otra dimensión cuando se atrevan a ir más allá de las llamadas zonas erógenas y comiencen a descubrir otras partes de su cuerpo con un potencial erótico que desconocían.
Tómalo con calma
Quizás el mayor reto para disfrutar del petting en los hombres es disfrutar cada momento y aprender que no se necesita penetrar frenéticamente para tener sexo intenso y placentero. Aún más: las posibilidades de alcanzar el orgasmo femenino se incrementan dramáticamente cuando no existe penetración y se estimula directamente el clítoris. También es probable que controles de una mejor manera tu respiración y la eyaculación si destierras de tu mente la idea de que la penetración es obligatoria.
Hazlo más divertido
No temas a utilizar accesorios para experimentar en pareja y maximizar el placer al momento de practicar petting: prueben con lubricantes, succionadores de clítoris, vibradores, anillos o cualquier otra clase de juguetes sexuales que les parezcan atractivos. Por supuesto, cualquier práctica sexual debe ser enteramente consensuada de forma explícita.
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