¿Qué significa tener serenidad emocional?
Hace algunos años, yo creía que el lujo consistía en presumir una bolsa fina con logo gigante, correr de un evento social a otro y pedir el vino más caro, aunque ni me gustara. Pensaba que tener la agenda llena me daba estatus y que el agotamiento que sentía era casi como una medalla de honor. Y sí, se veía glamuroso… pero carecía de paz.
El lujo más sexy: estar en paz contigo mismo
Hoy entiendo que el verdadero lujo no se compra, se siente. Y tiene un nombre simple pero poderoso: serenidad emocional.
Este lujo silencioso se encuentra en gestos pequeños que parecen insignificantes, pero lo cambian todo: elegir a quién dejas entrar en tu vida (y a quién no), preparar un café en calma un domingo por la mañana, dejar que la luz entre por la ventana sin correr a revisar el celular. El lujo es no tener que demostrarle nada a nadie: ni al jefe, ni a la vecina, ni al ojo hambriento de Instagram.
¿Te ha pasado? Esa calma deliciosa de cancelar un plan que no te emociona y quedarte en casa con una mascarilla, beber una copa de vino y escuchar tu playlist favorita. O ese alivio instantáneo de bloquear al ex que solo venía a desordenarte la cabeza. Ahí está el verdadero lujo: cuidar tu paz como si fuera tu vestido más valioso.
Serenidad emocional: el secreto mejor guardado
Claro que sigo disfrutando una buena camisa, el lino fresco en verano o esos tonos neutros que siempre funcionan. Pero entendí que la elegancia real no es disfrazarse, sino elegir piezas que te envuelvan y cuenten tu historia sin alardes. La vida se baila más ligero cuando dejas los miedos —y los tacones imposibles— en la puerta.
La moda también vibra en esta frecuencia. El famoso quiet luxury no es solo tendencia, es casi filosofía: menos logos, más esencia. Son prendas que duran años, cortes que respetan tu cuerpo y colores que transmiten calma en lugar de ansiedad. Ropa que aguanta risas, lágrimas, selfies con amigas después de un par de copas… y aun así te hace sentir poderosa.
Diseñadores en México que interpretan la serenidad emocional
- Francisco Cancino crea piezas atemporales con técnicas artesanales que dialogan con la tradición.
- ESÅNT apuesta por un minimalismo limpio y contundente.
- Cœur diseña ropa noble, pensada para acompañarte en la vida real.
- Liz Campos fusiona serenidad y sostenibilidad con textiles naturales y reciclaje creativo.
- Guillermo Jester, con su propuesta genderless, nos recuerda que la autenticidad siempre libera.
La serenidad emocional también se entrena
Es sentarte con tus fantasmas y, sí, hasta invitarlos a bailar. Es descubrir que estar sola no significa sentirte sola. Es hablarte con ternura incluso después de fallar. Y también es atreverte a decir que no cuando todos esperan que digas que sí.
Imagina empezar tu día sin prisa, en pijama, con café caliente y escuchando tu respiración en lugar del ruido de la ciudad. Ese instante en el que piensas: “no necesito nada más”. Eso es lujo.
Yo antes quería impresionar con marcas. Con ruido. Con exceso. Ahora quiero impresionar con calma. Prefiero querer bonito, comer pan crujiente, leer despacio y preguntar “¿cómo estás?”, quedándome a escuchar la respuesta.
Porque en un mundo que grita “compra más, corre más, presume más”, la serenidad emocional se ha convertido en la rebeldía más atractiva. Mientras otros compiten por visibilidad, la calma te da un brillo propio y te brinda bienestar, sin reflectores.
| La serenidad emocional no es un lujo efímero, es una decisión diaria por vivir con autenticidad y paz. Si quieres destacar en un mundo saturado de ruido, elige la calma. Porque nada es más magnético que alguien que brilla por dentro, sin necesidad de demostrar nada. |
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Autor: Por Aldo Civico
