La caída de los dientes de leche es un momento muy importante en la vida de los niños, es la parte que marca el paso a la adolescencia y el proceso de maduración emocional y mental. ¿Pero qué pasa con los dientes? ¿Qué se puede hacer con ese recuerdo de la infancia?
De acuerdo con un estudio liderado por el Centro Nacional para la Biotecnología de los Estados Unidos, los contenidos bioquímicos que tienen los dientes de leche pueden salvar la vida de los niños, ¿por qué? Esto se debe al alto contenido de células madre que hay en cada diente.
La función de las células madre
Como su nombre lo dice, las células madre son la materia en la que las demás células con funciones especializadas se generan. En términos simples, son una fábrica de materia prima en la que el cuerpo puede regenerar ciertos organismos a través de condiciones adecuadas o en un laboratorio.
De acuerdo con The Mayo Clinic, las células hijas se pueden convertir en nuevas fuentes de autorrenovación o madres o en células especializadas capaces de realizar tareas específicas como células sanguíneas, cardíacas, óseas o cerebrales. Y las madre son el único organismo del cuerpo capaces de hacer ese proceso.
El interés científico por estos organismos es que a través del entendimiento del proceso en el que se pueden convertir en otras células de función específica se podrá comprender de una mejor forma el desarrollo de las células y sus afecciones, con la capacidad de innovar en el tratamiento de cada enfermedad específica.
Otro uso importante es la capacidad de poder regenerar las células o tejidos perdidos o dañados a causa de diferentes padecimientos, además de poder traer medicamentos más seguros y de calidad sin el riesgo de dañar a las personas.
Las células madre y los dientes de leche
Las células madre se pueden encontrar y desarrollarse en la parte blanda de los huesos conocida como médula, de ahí la importancia de mantener los dientes de leche, ya que es una fuente de este organismo que se puede explotar más adelante.
El proceso de extracción de estos organismos es a través de la pulpa, para después esterilizarla en un kit especial. Este es un proceso similar al que se trabaja con los cordones umbilicales de los recién nacidos.
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Por eso, si tienes un hijo o conoces a un niño que está próximo a mudar de dientes no olvides comentarlo con las personas adecuadas. Tampoco es necesario tenerlos en un mostrador, se pueden guardar en una cajita, recuerda que las células madre son importantes para salvar la vida del infante.