Correr por amor: la motivación que transforma vidas
Si corres para mejorar tu salud, es excelente; si lo haces para bajar de peso, es magnífico; si tu intención es recrearte, es estupendo; si tu objetivo es competir, te felicito. Yo simplemente suelo correr por amor, y aprovecho para beneficiarme de las ventajas de correr.
Cómo nace el impulso de correr por amor
La conocí en mis años de estudiante alrededor de 1965. Fue “amor a primera vista”. Desde el primer momento, supe que sería lo mío. Conforme fuimos intimando, descubrí sus cualidades, aprendí a respetar su perfección. Cada noche era lo último en que pensaba y al despertar era lo primero que llegaba a mi mente. Este amor por la carrera se volvió como muchos, celoso y demandante, pero al mismo tiempo muy gratificante.
La carrera, mi compañera de vida
Los años pasaron y como todos los enamorados, vivimos disgustos, rupturas, separaciones, lastimaduras; pero también disfrutamos días de gran dicha. Ha sido la compañera de mi vida, la más exigente, la más amistosa, la que más se preocupa por mi salud, por mi estado mental, por mi imagen, por mis logros.
En momentos de angustia me devuelve la calma. Cuando estoy triste me consuela. Si estoy de mal humor, en minutos me ayuda a regresar a la tranquilidad. Y hace que mis noches, antes de insomnio, sean de sueño reparador. Al correr por amor puedo dejar de comer… y si estoy cansado, me aguarda tranquilamente. Es muy sociable, acepta con facilidad a todos. No importa cómo vistan, o su nivel social; tampoco si son altos o bajos, obesos o delgados.
Beneficios de correr
Correr fortalece el corazón y mejora la capacidad pulmonar, lo que contribuye a una mejor oxigenación de todo el cuerpo.
Fortalece los huesos y músculos y favorece el aumento de la densidad ósea.
Quema calorías y ayuda a mantener un peso saludable, lo que facilita la pérdida de peso y el mantenimiento de una buena forma física.
Reduce el riesgo de enfermarte de padecer diabetes, enfermedades respiratorias y algunos tipos de cáncer al mejorar la capacidad del cuerpo para regular la insulina y fortalecer el sistema inmunológico.
Manejo del estrés: El running libera endorfinas, conocidas como las hormonas de la felicidad, lo que puede reducir el estrés y mejorar el estado de ánimo.
Previene el deterioro cognitivo: Correr regularmente puede ayudar a mantener el cerebro activo y prevenir enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer.
Exposición a la vitamina D: Al correr al aire libre, aumentas tu exposición al sol, lo que incrementa los niveles de vitamina D en tu cuerpo, esencial para la salud ósea y el sistema inmunológico.
Correr por amor
Puedo dedicarme a correr por la mañana, por la tarde o por la noche; si hace frío, me brinda su calor. Por el contrario, durante la temporada de verano me refresca gratamente; si llueve, lo disfruto; si enfermo, colabora en mi recuperación. Cuando no estoy preparado y le exijo resultados, me castiga, me hace sufrir, pude inclusive llegar a lastimarme. Pero cuando sabe que estoy preparado, me transporta al paraíso, al Olimpo del placer y me convierte en un triunfador.
Gracias a mi amor por correr, he podido saborear las mieles del triunfo en Chicago, Los Ángeles, Washington y muchos eventos más. Pude viajar por muchos países y hacer muchos amigos.
Cómo el amor impulsa a correr
El amor es una poderosa motivación. Puede ser el amor por uno mismo, por mantener un estilo de vida saludable, o el amor por alguien más, que te inspire a levantarte y correr cada mañana.
Han transcurrido 59 años desde que la conocí y sigo disfrutando su compañía. Hoy somos ecuánimes, nos damos descansos. Hemos aprendido a respetar nuestra individualidad y el paso del tiempo. Ya no es posible exigirme tanto esfuerzo como antaño. Sin embargo, me mantengo fiel a esta saludable actividad, la que tanto me ha ofrecido, regalado, amado, la que tanto me da y poco me pide ella: la Carrera.
Consejos para empezar a correr
Encuentra tu motivación: Identifica por qué quieres empezar a correr. ¿Es por salud, por amor, o simplemente por diversión? Tener una motivación clara te ayudará a mantenerte enfocado.
Empieza despacio: No te exijas demasiado al principio. Comienza con caminatas rápidas e incrementa gradualmente la intensidad y la duración de tus carreras.
Usa ropa cómoda: un buen par de zapatillas es esencial. Asegúrate de que sean cómodas y adecuadas para tu tipo de pisada. Usa ropa transpirable y ajustada, diseñada específicamente para correr. Esto te ayudará a moverte con libertad y mantenerte seco.
Correr en compañía puede ser una experiencia muy gratificante. No solo compartes la actividad, sino también los logros y los retos. Es una excelente manera de fortalecer relaciones y compartir tiempo de calidad con alguien más.
Si corres solo, el amor puede ser tu guía. Puede ser el amor por tu cuerpo, que te inspira a mantenerte saludable, o por el simple gusto de hacerlo, que disfrutas mientras corres por senderos al aire libre.
Yo corro por amor. Y tú, ¿por qué corres?
HÉCTOR CHÁVES URINCHO / Profesor de Educación Física / Entrenador de Corredores / Capacitador y Conferencista / E-mail: urinchos@prodigy.net.mx / Cel: 55 1954 5250 |
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